EN EL DÍA DE TU SANTO
La Virgen Blanca... la de las Nieves
me trae con más insistencia tu recuerdo...
Hoy miro a mi alrededor
acariciando sueños... de volver a verte
de cruzar el horizonte del pasado
y convertirlo en presente.
En ese presente de tiempo intangible
en el que tu esencia perdura...
cada vez que te pienso.
Y tu dulce voz suena
con sinfonías de arpas y querubines
acariciando mi alma...
con suaves y amorosos roces
recogiendo mis lágrimas...
que lloran tu ausencia
cada vez que revivo tu marcha
cubierta con tules de niebla blanca...
como soñaste.
Sin ti... respiro la soledad en un lugar sin tiempo...
sumergiéndome en el fulgor del fuego...
con el pensamiento al viento...
mirando el horizonte
Y sentada en el acantilado espero...
buscando el cálido aroma...
de la fragancia de tu alma
y reviviendo... mis sueños de niña.
Un olor a rosas y violetas
impregnan el aire de mis pensamientos
en este mundo dual... de tristezas y alegrías
pagando el precio de la vida
en esa noche que el día disolvió...
encadenando el alma al silencio.
Mientras... las nubes se besan con las olas
diluyéndose con la espuma del mar
reivindicando amaneceres
ante la atenta mirada de la Luna
que con su manto de estrellas... me envuelve
mientras llora a mi lado... gotas de rocío.
Y tu memoria perdura en el tiempo invisible...
cada vez que te pienso.
Neus T.Gómez